Cierta vez pensaba en el universo,
Como sería la tierra desde lejos,
Y en esos pensamientos inmerso,
Comienzo a flotar, cierro los ojos.
No se si estoy presente,
O en otra dimensión,
Me siento ausente,
Es extraña esta sensación.
Veo la tierra brillante,
Azul celeste, ¡Majestuosa!,
Con tonos de verde, cambiante,
Distante, ¡Hermosa!.
De pronto hay algo a lo lejos,
No alcanzo a ver lo suficiente,
Me acerco, son reflejos,
De color naranja, refulgente.
¡Por Dios!, una guerra está comenzando,
Es una herida abierta, sangrante,
Son hermanos, y se estan matando,
Porque ese odio constante.
Fué un segundo, posiblemente,
Aquella apocaliptica visión,
Que aún perdura en mi mente.
Por ellos, Dios, humildemente perdón.-
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario